Introducirse en la experiencia de una compraventa de un inmueble no es una tarea sencilla. Por ello, es esencial contar con el asesoramiento de especialistas inmobiliarios. En este contexto, cuando un propietario está interesado en empezar esta transacción, es importante conocer cuáles son las diferencias entre mediación y asesoramiento inmobiliario.
¿Qué es el asesoramiento inmobiliario?
El asesoramiento inmobiliario consiste en ofrecer ayuda al cliente para investigar el mercado inmobiliario y de la vivienda, para poder dar información sobre las tendencias y las condiciones actuales de compraventa.
La tarea principal de un asesor consiste en ofrecer un servicio que se adapte a las necesidades del cliente para comprar o vender un inmueble. En Almanova Inmobiliaria, tenemos como prioridad las necesidades del cliente para poder trabajar en base a ellas.
En algunos casos, el asesoramiento inmobiliario puede llegar a incluir tareas de todo tipo, como el análisis del mercado, realizar home staging, redactar los contratos de las viviendas, ofrecer asesoramiento legal y fiscal sobre las operaciones de compraventa y alquiler e informar sobre los impuestos que deben abonarse según la operación que se realice.
Ventajas de contar con la ayuda de un asesor inmobiliario:
- Experiencia y conocimiento: los asesores inmobiliarios tienen una amplia comprensión y sensibilidad del mercado inmobiliario local y son altamente calificados. Pueden informar sobre los precios de las propiedades, las tendencias del mercado y las mejores áreas para invertir o vender.
- Evaluación de propiedades: los asesores inmobiliarios pueden determinar el valor de mercado de una propiedad evaluando a fondo. Esto es crucial para los vendedores y compradores porque les permite establecer precios competitivos y justos.
- Estrategia de compra y venta: los asesores de bienes raíces trabajan en estrecha colaboración con sus clientes para crear estrategias de compraventa exitosas. La identificación de las propiedades adecuadas, la negociación de precios y la coordinación de transacciones.
- Protección de Intereses: los asesores inmobiliarios protegen los intereses de sus clientes en todas las etapas del proceso de compraventa. Su objetivo es evitar posibles riesgos legales y asegurarse de que sus clientes reciban el mejor trato posible.
¿Qué es la mediación inmobiliaria?
El objetivo de un mediador inmobiliario es acercar las posturas de ambas partes para conseguir un objetivo común entre el propietario y el comprador potencial del inmueble. Teniendo por tanto el objetivo de contribuir y terciar entre las partes para llegar a un acuerdo.
El mediador puede ser contratado por ambas partes de la transacción, creando un rol imparcial ante esta. Sin embargo, este perfil puede ser contratado de igual forma por solo una de las partes del contrato, si bien debe mantener imparcialidad en el trato, este mediador suele ganar una comisión pactada si se realiza la venta.
Características de un mediador inmobiliario:
Neutralidad: el mediador de la vivienda no participa en la transacción. Su responsabilidad es ayudar a ambas partes a comprender sus preocupaciones y puntos de vista y colaborar para encontrar una solución.
Comunicación mejorada: Mejorar la comunicación entre el comprador y el vendedor es una de las funciones principales del mediador. Esto puede resultar especialmente beneficioso en situaciones de negociación con malentendidos o desacuerdos.
Resolución de conflictos: La mediación inmobiliaria se emplea frecuentemente al presentarse conflictos o diferencias entre las partes participantes de una operación. El mediador se encarga de solucionar estos conflictos de forma pacífica y prevenir disputas costosas.
Alcance de un acuerdo mutuo: este acuerdo puede incluir términos de precio, condiciones de venta y otros detalles relevantes.
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